Principalmente no quiero aceptar que por más que insista, definitivamente, no soy asexual-aunque lo parezca la mayor parte del tiempo-, ni tampoco que posiblemente estoy enamorada u obsesionada con mi mejor (y único) amigo, ni que no hay probabilidad alguna de que surja algo y si la hay no la quiero, principalmente por miedo y por toda la historia que se desarrollo en estos seis años que tengo de conocerlo.
No quiero aceptar que tengo miedo, porque me asusta caer. Tampoco el hecho de que probablemente ese sentimiento de "no encajo en ningún lugar" sea culpa mía, al igual que el sentimiento de abandono que cargo. No quiero tampoco ver que quizá toda esa tontería de dormirme hasta que me encuentro sumamente exhausta, es una prueba de lo masoquista que soy, al igual que eso de querer leer novelas de terror y fanfics angst, porque quiero sentirme asustada o conmovida hasta el punto de llorar a lágrima viva.
No quiero abrir los ojos a aquella realidad, porque probablemente me daré cuenta de lo increíblemente egoísta que soy para conmigo misma, probablemente entienda que me castigo a mí misma como he hecho siempre, puesto que todo el mundo parecía girar en torno a los demás y no mío, en cierta forma necesitaba cuidarme a mí misma.
No deseo ver lo mucho que me contradigo, ya que digo una y otra vez que no quiero conocer a nadie nuevo, que no quiero encariñarme con nadie y lo hago todo el tiempo. También le miento a mi madre diciéndole que busqué su felicidad aun si eso la lleva a casarse, pero yo no quiero que se casé, así como tampoco deseo que mi hermana se vaya lejos a estudiar su residencia, ni quiero ver a mi hermana menor cada vez más ausente y metida en sus cosas. Miento cuando digo que quiero estar sola, ya que por dentro gritó que no me dejen, pero también lo quiero y lo necesito. Miento al decir que nunca miento. Miento al decir que siempre he estado sola, porque nunca lo he estado, he estado sola en medio de un montón de gente que pasa de mí, pero nunca lo he estado de manera literal.
Miento al decir que no quiero llorar cuando mi mirada se nubla y las lágrimas se arremolinan en mis ojos, miento cuando digo estar bien y me da por subirle el ánimo a todos. No quiero aceptar que me evado y que evado mis problemas pasando de mí como hacen los demás...
No quiero no querer mañana, porque sé que despertaré con la mente hasta el tope de sueños y sin esta sensación de inapetencia y vacío que está presente ahora, sé que sonreiré y querré cambiar al mundo (de nuevo), pero también sé que así como me levanté volveré a caer y se repetirá todo hasta que vuelva a levantarme.
Caer y levantarse, a eso se reduce todo, pero por ahora lo único que quiero es un rato de tranquilidad. ¿Cuántas mentiras digo a diario...?
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