¿Cuántas veces me he negado a ver el mundo? ¿Cuántas veces, pensado que nadie me comprendía o se esforzaba por hacerlo, me negué a ver los esfuerzos que hacían por acercarse a mí, por acompañarme? ¿Cuántas veces me encontré con personas que se sentían exactamente igual a mí y las ignoré, siendo que yo misma decía que cuando encontrara a alguien así probablemente sería feliz? ¿Cuántas oportunidades perdí sólo por estar dentro de mí misma y ahogándome en un vaso de agua?
¿Cuántas lágrimas he derramado sintiéndome sola e incomprendida? ¿Cuántas veces más seré capaz de ignorar a todos y perderme en mí misma? ¿Cuántas veces dije nadie me conoce incluyéndome a mí misma dentro de ese nadie? ¿Cuántas veces me dije "no eres real" para conseguir creérmelo? ¿Por qué en lugar de sentirme poco especial, me siento increíblemente acompañada y aliviada cuando encuentro a alguien que piensa exactamente lo que pensé o estoy pensando?
¿Por qué tuvo que pasar tanto tiempo para que un "te quiero" o un "te entiendo" me sonaran reales y no como asquerosas mentiras?
Si con una palabra, si con una acción puedo cambiar algo,
si puedo curar aún sin ser consciente de ello,
si puedo tocar a alguien de alguna manera,
si logro consolar, o cerrar una herida,
si puedes ver luz en medio de la oscuridad,
si puedo robarte una sonrisa,
¿acaso no vale la pena intentarlo?
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